Nos hicieron creer…

@Marcelaloopez

Nos hicieron creer que “el gran amor” sólo sucede una vez, generalmente antes de los 30 años. No nos contaron que el amor no es accionado, ni llega en un momento determinado de la vida.

Nos hicieron creer que cuando el corazón se quiebra difícilmente vuelve amar. No nos dijeron que con un abrazo de la persona correcta, el corazón une todas sus piezas y vuelve a latir con mucho más fuerza.

Nos contaron que el amor largo y duradero es difícil de encontrar, como si fuera cuestión de suerte. No nos dijeron que el amor se construye y se fortalece día a día aún en la más densa adversidad.

Nos hicieron creer que las amistades perduran toda una vida. No nos dijeron que los amigos verdaderos libran cruentas batallas e interminables desacuerdos y, al final,  sólo quienes logran sobresalir de la adversidad pueden ser llamados amigos de verdad.

Nos dijeron que las mentiras “piadosas” pueden evitar el sufrimiento der ser amado; nunca nos advirtieron que cuando la verdad sale a flote, las mentiras lastiman y hunden al otro en la más profunda de las tristezas.

Nos hicieron creer que el tiempo lo cura todo, no nos hablaron de lo complicado que es el proceso del olvido, lo que duele curarse las heridas y lo que cuesta levantarse una vez caído.

Crecimos creyendo que la felicidad depende de la riqueza acumulada, no nos dijeron que no es necesario comprar una gran casa para obtener un hogar y muchos menos tener una cuenta en el banco para disfrutar de la verdadera felicidad.

Nos educaron para echar raíces, sin saber que teníamos alas. No dijeron que habría que casarnos y formar nuestra propia familia; no nos hablaron de la libertad, de la riqueza intelectual que te da el conocimiento, del efecto placentero que nos provoca el viajar y conocer nuevas latitudes, no nos hablaron de la felicidad que te causa la soledad.